Accesorio indispensable, casi se diría los mejores amigos para el invierno, son los siempre abrigados y bellos guantes al crochet.
Son muchas las maneras de abordar su confección. La más cómoda de hacer, consiste en empezar por la parte de la palma y dorso (puede ser en redondo, o bien en rectángulo con costura), siempre dejando el espacio necesario para tejer luego el pulgar, y tejiendo en dirección desde la muñeca hacia los dedos. Una vez completa toda la palma, se procede a tejer los dedos. Para el pulgar, con tomar los espacios dejados libres anteriormente, basta. Para los otros cuatro dedos, hay que repartir los puntos, y completar con cadenas intermedias entre meñique, anular, mayor e índice. Cosa importante: conviene ir probándose permanentemente el tejido, especialmente a la hora de completar la altura de cada dedo (cada quien tiene sus medidas personalísimas de los dedos). Cuestión para nunca olvidar: el número de puntos para todos los dedos debe ser siempre el mismo, como así también, el número de hileras para cada dedo debe ser igual en ambas manos (pulgares izquierdo y derecho iguales, índices iguales, etc.). Otro punto a tener presente: las disminuciones deben ser de las denominadas «invisibles», a fin de evitar horribles agujeritos (que no son rotura) en las puntitas de los dedos.
Sólo hay que dejar volar la imaginación (y los dictámenes del estilo de cada tejedora), y los diseños de guantes al crochet serán infinitos.
Armé un video con las fotos de mis guantes. Aquí va:
(Soldebuenosaires) CLAUDIA DANEU
CROCHET SOÑADO, by Claudia Daneu 